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Foto del escritorYurena Rodríguez

Soy buena persona


Muchas veces pido a la gente que mencione algo positivo sobre sí misma, incluso a aquella gente que no se tiene gran estima. Y lo curioso es que la mayoría responde: "Soy buena persona". Hagan la prueba.

Me planteo qué significa para cada uno ser "buena persona", qué engloba este concepto y por qué tendemos a expresar esta afirmación con un gesto de timidez encogiendo los hombros.

Ser una buena persona es algo muy genérico y no da información precisa de su personalidad. Describir a alguien como buena persona puede hacernos pensar que es alguien que simplemente no va a agredirnos o que simplemente está dotada de empatía y tratará de no hacer daño deliberadamente.

Soy buena persona

Lo cierto que es que las buenas personas están hechas de hábitos y comportamientos. Pero incluso una buena persona puede hacer algo malo en una ocasión como una mala persona puede tener un gesto amable en algunos momentos. La distinción de buena o mala persona nace de nuestra necesidad de categorizar para tener una referencia de dónde estamos seguros y con quiénes. También nos ayuda a pensar que somos merecedores del buen trato o la atención de los demás.

Ser buena persona puede ser para algunos una realidad pero también un propósito.

En la práctica, la realidad es que cada persona entiende y mide de una forma diferente lo que es ser alguien bueno. Así que, la próxima vez que alguien te pregunte o quieras mostrar tu mejor lado intenta tener ensayado tu "discurso de ascensor"* en el que hables de las características más presentes en ti o las que mejor te definen. Claro está que, para ello, primero has de reflexionar un poco en qué hábitos tienes o cómo sueles ser en la mayoría de las situaciones.

Yurena Rodríguez.

Psicóloga

*el discurso de ascensor es una expresión que se utiliza en el mundo empresarial y consiste en presentar de forma breve y concisa tu idea o negocio para que pueda ser recordada con facilidad por un posible cliente/inversor.


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