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  • Foto del escritorYurena Rodríguez

Ex-présate


Todos necesitamos hablar. Unos somos más expresivos que otros pero, en general, casi todo el mundo busca o se alegra de encontrar a alguien que le entienda, que comparta experiencias o que haya pasado por sus vivencias. Casi todo el mundo sueña con ese confidente imaginario con quien ser uno mismo, sin barreras, y sin salir avergonzado del encuentro. Por suerte, algunos lo encuentran; otros, en cambio, lo buscan en la consulta de algún profesional y otros transforman sus intimidades en verso o mediante alguna forma de arte.

Hoy en día, las consultas de psicología se visitan no solamente cuando uno ya no tiene fuerzas o herramientas para enfrentar algo solo, sino que también se han convertido en espacios de confidencias o en los que expresar preocupaciones por cuestiones cotidianas. Cada vez más, las consultas adquieren esa connotación americana de psicólogo/a de cabecera y la gente comparte orgullosa las vivencias o reflexiones con su psicólogo/a.

exprésate

Esto sucede, a mi juicio, porque expresar las emociones empieza a verse no solo como algo que denota sensibilidad, sino también como algo consciente y necesario para nuestra salud mental. "Ex-presarse", si se hace adecuadamente, es también liberarse. Te liberas de malos recuerdos, de resentimientos, de temores, pero también te llenas de sensaciones agradables que al compartirlas multiplican la satisfacción que te aportan.

En definitiva, lo importante y lo más difícil es expresarnos con un fin y de manera sana, sin herir a las partes implicadas, en primera persona y desde nuestros sentimientos. Expresar las emociones es tan importante como decidir cuándo, cómo y con quién hacerlo.

Yurena Rodríguez.

Psicóloga.


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